martes, 31 de mayo de 2016

Mercantilismo y Monopolio Comercial

En clase estuvimos hablando como la Corona española organizó ECONÓMICAMENTE sus colonias americanas... Para eso vimos que se sustentaba en una doctrina económica de la época, denominada MERCANTILISMO y entre las medidas que adoptó, hablamos del MONOPOLIO COMERCIAL y del SISTEMAS DE PUERTO ÚNICO y FLOTAS Y GALEONES.

Les dejo el texto aquí:

EL MERCANTILISMO:

Durante los siglos XVI y XVII se consideraba que la riqueza de una nación provenía de la posesión de oro y plata. Los metales podían obtenerse de varias formas: a través de su extracción directa, mediante la venta de productos manufacturados, o bien, a través del robo y la piratería. Mediante estas acciones los Estados europeos buscaron acumular la mayor cantidad de metales posible. La moneda de metal precioso permitía comprar y vender, estimular la producción, pagar tropas y funcionarios y mantener el orden público. La clave para hacerse de los metales suficientes  se encontraba en el MONOPOLIO COMERCIAL de las colonias y en una BALANZA COMERCIAL favorable. 

Escrito

Con 2°1 realizaremos el escrito el Lunes 6 de Junio. Con 2°2 lo realizaremos el jueves 9 de Junio.

Les dejo los temas aquí.

  • Régimen Indiano 
    • En este tema deben leer sobre las autoridades españolas en España y en América para organizar las posesiones.
  • Debate sobre la Naturaleza Indígena
    • Diferentes posturas sobre el asunto
    • Conclusión a la que llegó la Corona luego del aporte del Papa
  • Colonización del Río de la Plata.
    • La expedición de Pedro de Mendoza ¿Por qué fracasó la fundación de Buenos Aires?
    • Objetivos de estas fundaciones y diferencia con las anteriores (México y Perú)
    • ¿Por qué participan mujeres?
    • Características de la población indígena de la región.
  • Sistemas de dominación Indígena o Tutelaje
    • Encomienda
    • Corregimiento-Reducción
    • Mita
    • Características y diferencias entre ellas.
  • Mercantilismo y Monopolio Comercial
    • Definición
    • Sistema de puerto único y Flotas y Galeones.
    • Consecuencias
  • Sociedad Hispanoamericana
    • Grupos sociales: Españoles, Indígenas y Africanos.
    • Características de cada uno y diferencias.
    • Mestizaje,
  • Temas estudiados en tarea domiciliaria: "Nueva Era" y "Reforma protestante". 
    • En el escrito habrá una pregunta de cada tema, van a poder elegir uno de estos temas.
¿Que puedo hacer para que me vaya bien en este escrito?

Es PRIMORDIAL que UTILICEN TODOS LOS MEDIOS POSIBLES: 
  • no alcanza estudiar del cuaderno y las fichas que trabajamos en clase y compartimos en el Blog. Aunque es necesario usar esta información
  • DEBEN basar su estudio también en EL LIBRO DEL CURSO, para eso es que lo tenemos: como material de apoyo para estudiar y hacer tareas. 
  • SUGERENCIAS: Empiecen a estudiar lo antes posible, de esa forma pueden preguntar sobre las dudas que surjan en la clase del viernes o via mail.

jueves, 26 de mayo de 2016

Invitación Feria del libro Infantil y Juvenil

Les dejo publicada la invitación a la Feria del Libro Infantil y Juvenil de la Cámara Uruguaya del Libro. Se realiza en el hall de la Intendencia de Montevideo hasta el domingo 5 de junio.

En el link pueden encontrar toda la información sobre horarios, presentaciones, etc.






martes, 24 de mayo de 2016

Sistemas de Tutelaje (Sistema de dominación indígena)

En clases anteriores hablamos de la discusión que generó entre los españoles la "Naturaleza Indígena". Esta discusión que protagonizaron Fray Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda en Valladolid (1551), con la intervención del Papa mediante, dio como conclusión una política general de la Corona basada en la siguiente idea: 

Los INDÍGENAS son SÚBDITOS de la Corona, por lo tanto, tienen DERECHOS y merecen PROTECCIÓN por parte de las autoridades. Sin embargo, a pesar de ser considerados HOMBRES y MUJERES con derechos, NO SON IGUALES A LOS ESPAÑOLES... y serán considerados por los españoles como si fueran NIÑOS/AS, por lo que debían tener un TUTOR que los representara legalmente, que los protegiera, que los evangelizara, ya que los españoles creían que no podían valerse completamente por sí mismos. 

Sobre esta idea, vimos diferentes formas de TUTELAJE de los indígenas...

ENCOMIENDA: 

Esta es la primera forma de dominación o tutela indígena. Consistía en un privilegio que se le otorgaba a un particular (español), a través de la concesión de un territorio con su correspondiente explotación junto con los pobladores. En este territorio el ENCOMENDERO (español a cargo de la encomienda) tenía ciertas obligaciones:

  • EVANGELIZAR a los indígenas de la encomienda.
  • PROTEGER de los Indígenas y del territorio que le fue asignado
  • PAGAR IMPUESTO a la Corona.
A cambio de esto, el encomendero se beneficiaba del trabajo de los indígenas, es decir, vivía de la producción de estos. Muchas veces estas encomiendas eran de por vida, en ocasiones se volvieron hereditarias, y los encomenderos se transformaron en grandes terratenientes que no respetaban e absoluto los derechos indígenas, obligándolos a trabajar lo más posible, para obtener mayores beneficios.



CORREGIMIENTOS-REDUCCIONES:

Esta forma de TUTELA indígena fue una respuesta a los abusos de los encomenderos, tantas veces denunciados por muchos españoles, como Fray Bartolomé de las Casas. La diferencia más importante entre la ENCOMIENDA y el CORREGIMIENTO es que este último está a cargo de un CORREGIDOR, es decir, un empleado a sueldo de la Corona, nombrado para este fin. 
Se trataba que estos "Pueblos de indios" estuvieran separados de las poblaciones españolas, lo que posibilitó que los indígenas tuvieran mayores libertades, aunque también tenían obligaciones: debían PAGAR UN TRIBUTO a la Corona y trabajar en el Corregimiento. Pero la propiedad siguió siendo comunal en la mayoría de los casos.
El corregidor, además, tenía prohibido aprovecharse del trabajo indígena, por lo que se producía en el corregimiento era reinvertido en mejoras para todos. Muchas veces los indígenas tenían Cajas en las que ahorraban tributos para épocas de poca producción, de manera de no endeudarse con la Corona. También, por debajo del corregidor, se encontraba un CONCEJO DE ALCALDES que estaba integrado por indígenas, elegidos por ellos mismos. Esta forma de tutela permitió que los indígenas conservaran costumbres y tradiciones.

MITA:

Grabado Cerro Potosí
Estas forma de aprovechar el trabajo indígena no era nueva en América, sino que ya era utilizada por los Incas y los Aztecas. Consistía en un tipo de TRABAJO OBLIGATORIO que los indígenas realizaban para el Inca, para el Azteca, o para el Imperio. Este trabajo implicaba la realización de canales, obras públicas o la extracción de metales.

Antes de la Conquista: antes de llegar los españoles, los indígenas tenían bien organizado este trabajo. El trabajo duraba un año, cada población aportaba una parte de su mano de obra, un 14% aproximadamente, de manera que a cada persona le tocara ir a la MITA 1 AÑO CADA 7.


Cerro de Potosí. Mita principal de extracción de metales.
Los españoles continuaron esta forma de trabajo obligatorio, pero ya no respetaban las cuotas indígenas... Tras su llegada muchas poblaciones indígenas se redujeron por enfrentamientos, enfermedades, suicidios, etc, sin embargo los españoles intentaron seguir extrayendo las mismas cantidades de metal que cuando las aldeas eran más pobladas. El resultado fue que para muchos, el trabajo en la MITA implicaba ASISTIR 1 AÑO CADA 2 O 3, haciendo imposible volver a la población de origen para continuar con su producción familiar.
Muchos se trasladaban con sus familias, y no volvían más a su pueblo, perdiendo sus lazo con la comunidad de origen. En otros casos, los españoles los llevaban a la fuerza, ENCADENADOS.
Si sumamos que los trabajos eran muy exigentes físicamente (como en las minas) las consecuencias para la población indígena fueron terriblemente negativas. 



Cerro Rico de Potosí en la actualidad

Debate sobre la Naturaleza Indígena

Además de problemas políticos (cómo gobernar territorios tan extensos) o económicos (cómo sacar el mayor provecho posible a las nuevas colonias), los españoles también se enfrentaron a la cuestión indígena. ¿Quiénes eran estos individuos? ¿Se trataba de personas como los españoles? ¿Podían tener derechos? ¿Qué tipo de trato debían recibir?

Todas estas cuestiones generaron un gran debate entre los españoles, con fuertes divisiones. En clase trabajamos con las dos posturas antagónicas... La de Juan Ginés de Sepúlveda y la de Fray Bartolomé de las Casas,

Debate sobre la Naturaleza Indígena:
Con perfecto derecho los españoles imperan sobre estos bárbaros del Nuevo Mundo e islas adyacentes, los cuales en prudencia, ingenio, virtud y humanidad son tan inferiores a los españoles como niños a los adultos y las mujeres a los varones.
¿Qué cosa pudo suceder a estos bárbaros más conveniente ni más saludable que el quedar sometidos al imperio de aquellos cuya prudencia, virtud y religión los han de convertir de bárbaros (…) en hombres civilizados?
Por muchas causas están obligados estos bárbaros a recibir el imperio de los españoles (…) y a ellos ha de serles todavía más provechoso que a los españoles (…) y si rehúsan nuestro imperio podrán ser compelidos por las armas a aceptarle, y será esta guerra justa por ley natural.
La primera razón de la justicia de esta guerra de conquista es que siendo por naturaleza bárbaros, incultos e inhumanos, se niegan a admitir el imperio de los que son más prudentes, poderosos y perfectos que ellos; imperio que les traería grandísimas utilidades y comodidades.
Juan Ginés de Sepúlveda. De la justa causa de la guerra contra los indios. 1550
…………………………………………………………………………………………………………
Todas estas universas e infinitas gentes crió Dios los más simples, sin maldades. Obedientes, fidelísimos a sus señores naturales y a los cristianos a quienes sirven. Son sumisos, pacientes, pacíficos y virtuosos. No son pendencieros, rencorosos o vengativos. Además, son más delicados que príncipes y mueren fácilmente a causa del trabajo o enfermedades. Son también gentes que no poseen ni quieren poseer bienes temporales. Seguramente que estas gentes serían las más bienaventuradas del mundo si solamente conocieran al verdadero Dios.
En estas ovejas mansas (…) entraron los españoles (…) como lobos y tigres y leones crudelísimos de muchos días hambrientos. Y otra cosa no han hecho hasta hoy, sino despedazarlas, matarlas, atormentarlas y destruirlas por extrañas y varias maneras de crueldad: en tanto grado que habiendo en la isla Española sobre 13000 almas que vimos, no hay hoy de los naturales de ella doscientas personas.
Fray Bartolomé de las Casas.  Brevísima relación de la destrucción de las Indias. 1542.
…………………………………………………………………………………………………………
Nosotros consideramos que los indios son verdaderos hombres, y que no sólo son capaces de comprender la religión católica, sino que desean ardientemente recibirla. (…) A dichos indios y a todas las otras gentes que los cristianos puedan descubrir más adelante, de ningún modo se les podrá privar de su libertad o bienes.

Papa Pablo IIIEncíclica


A la izquierda, Fray Bartolomé de las Casas, a la derecha J.G. de Sepúlveda

jueves, 19 de mayo de 2016

Tarea especial port-folio 2

Estimad@s estudiantes, dejo la segunda parte del trabajo. La fecha de ENTREGA será entre Jueves 26 y viernes 27. Cerrada la semana ya no se reciben más tareas.

Debe ser entregada en formato papel, a MANO o IMPRESO (no se reciben tareas en versión digital)

Les recuerdo que la tarea se puede realizar en parejas o de forma individual.

Atención:

En esta segunda tarea deberán buscar material, ya que el texto es insuficiente. Para eso les recomiendo los manuales del curso y otros manuales a los que pueden acceder en la biblioteca del colegio. De no tener material suficiente, me escriben y les mando textos adecuados sobre los temas que necesiten.

Las Reformas Religiosas:

Durante la Edad Media, la Iglesia católica consolidó un gran poder que no sólo abarcaba el aspecto religioso, sino también político, económico y social convirtiéndose en la guía espiritual de Europa Occidental.
            A pesar de esa importancia, existieron una serie de factores dentro de ella que, lenta y progresivamente, la desprestigiaron. Por ejemplo, era frecuente la compra de cargos eclesiásticos, no cumplir con el celibato sacerdotal y el modo de vida fastuoso de muchas autoridades. A veces, los obispos olvidaban sus obligaciones de ayudar a los más necesitados y en algunos casos no celebraban la misa ni distribuían los sacramentos. Toda esta realidad fomentó profundas críticas desde la propia Iglesia. A pesar de la realidad de la Iglesia los europeos de la época seguían siendo profundamente religiosos.
            Durante la Edad Media ya se habían impulsado dentro de la Iglesia movimientos de renovación, como las órdenes de los Franciscanos y los Dominicos, que criticaban las grandes riquezas y las actitudes de algunos eclesiásticos. Pero, a diferencia de entonces, en el siglo XVI se produciría una ruptura dentro del cristianismo.
            Además de la difícil situación interna de la Iglesia, otro aspecto muy cuestionado fue el tema de las indulgencias. En 1515 el Papa León X se propuso finalizar la construcción de la Basílica de San Pedro para lo cual solicitó ayuda a los fieles otorgando indulgencias a quienes quisieran contribuir económicamente. Desde dentro y fuera de la Iglesia surgieron voces de protesta que se oponían a su venta debido a que no estaba permitido en las Sagradas Escrituras. 
            Otros motivos de la Reforma fueron las ambiciones políticas y económicas de los monarcas y príncipes europeos de principios del siglo XVI. Estas autoridades deseaban los territorios y riquezas que estaban en manos de la Iglesia, percibir los altos impuestos cobrados por ella y poder decidir en el nombramiento de obispos locales.
            Se puede considerar que la Reforma comenzó con las inquietudes de un monje agustino llamado Martin Lutero quien se opuso tanto a las indulgencias como a la su venta lo cual le significó su excomulgación por el Papa en 1521.
            Las relaciones entre el Papado y Lutero eran cada vez más difíciles. Por otra parte, el emperador del Sacro Imperio, Carlos V (católico y defensor del pontificado) pretendió desterrarlo pero Lutero fue apoyado por príncipes que protestaban ante esa decisión y así surgió el nombre de “protestantes”.
            La prédica de Lutero llevó a la conformación de una nueva Iglesia. Introdujo el concepto de sacerdocio universal, por el cual cada cristiano puede asumir las funciones propias de un sacerdote, como leer e interpretar la palabra de Dios (antes los fieles iban a la Iglesia y escuchaban al sacerdote leer las Sagradas Escrituras en latín).
            La salvación del alma era un acto individual para Lutero. Lo único que puede salvar al hombre es su fe, su amor puro y verdadero por Dios, no las obras que realiza, aunque como expresó el reformador: “las buenas obras no hacen piadoso al hombre, pero el hombre piadoso hace buenas obras”.
Con respecto a las prácticas religiosas, la Iglesia luterana estableció un culto dominical compuesto por rezos, lecturas de la Biblia, cantos y el sermón del pastor. El interior de estas iglesias es austero, sin imágenes religiosas.
            Las ideas de Lutero se extendieron por gran parte de Alemania y por los países vecinos; muchos creyentes optaron por abandonar la Iglesia Católica: la división de la Iglesia ya se había producido.           
            La expansión de las ideas reformistas, producida en un marco de enfrentamientos entre príncipes, reyes y autoridades de la Iglesia, abarcó el norte y centro de Europa. Con ella surgieron nuevos reformadores, uno de los cuales fue Juan Calvino. El “calvinismo” se propagó por Suiza, Francia (los calvinistas franceses recibieron el nombre de “hugonotes”), Inglaterra, Países Bajos e incluso fuera de Europa por América del Norte. En Inglaterra, la Reforma Religiosa tuvo características diferentes ya que fue impulsada por el propio monarca y se creó la iglesia denominada Anglicana.
            Al mismo tiempo que se producían las Reformas Protestantes, el catolicismo también se reformó. A este movimiento de renovación se le conoce con el nombre de Reforma Católica. Tenía como principales objetivos corregir los abusos cometidos por el clero a la vez que definir y precisar el dogma católico.
            En un principio, la Iglesia intentó atacar directamente a los reformadores, aunque también utilizó instrumentos para responder a la nueva realidad que se vivía. Convocó un Concilio General en la ciudad italiana de Trento (1545-1563) con la finalidad de establecer los principios de la doctrina y lograr un clero instruido y honesto. Propició la renovación de las órdenes religiosas y la creación de otras nuevas así como también reorganizó el Tribunal de la Inquisición.
El Concilio condenó la tesis de los protestantes y definió la doctrina católica. Consideró que la salvación se obtiene por la fe y por las obras, ya que el cristiano vive su fe, demuestra su amor por Dios y al prójimo por las obras de todos los días. Afirmó la libertad del hombre de elegir su salvación. Se aceptaron las indulgencias como una forma de conseguir el perdón de los pecados.
El Tribunal de la Inquisición era un organismo eclesiástico fundado en la Edad Media, que tenía por función la vigilancia de las prácticas religiosas de los fieles (en España se había perseguido a judíos y musulmanes). En el siglo XVI se encargó de controlar la interpretación de los textos sagrados, la vigilancia del clero y de los fieles para frenar los avances del protestantismo. Se acusó a los protestantes de herejes y se los persiguió.
A mediados del siglo XVI se inició la transformación o la creación de órdenes religiosas, como la que llevó a cabo Teresa de Jesús o la Compañía de Jesús creada por Ignacio de Loyola. Del punto de vista religioso, Europa perdió la unidad que tenía hasta entonces.
Los movimientos de revisión y reforma de las ideas religiosas comenzaron a hacerse en nombre de la libertad, y sin embargo, una vez afirmados,  la intolerancia religiosa se adueñó de toda Europa. Cada uno de los movimientos, católicos o protestantes, pretendía tener la verdad universal, y trataron de imponerla por todos los medios posibles. Además, como ya  lo vimos en los motivos, no fueron solamente movimientos de carácter religioso sino que los aspectos políticos, económicos y sociales los convirtieron en enfrentamientos por territorio, poder o posesión de riquezas. En este período, entre los siglos XVI y XVIII se caracterizó por las guerras de religión, entre estados con diferentes religiones, y por la persecución al interior de cada Estado.
Pensar la Historia. 2° año C.B. V.V.A.A. Contexto. Montevideo, 2013.


Actividad:

1-    Explica con tus palabras los principales motivos de crítica a la Iglesia católica. Averigua a qué llamamos “indulgencias”.

2-    Narra en pocas líneas una breve Biografía de Martín Lutero y responde ¿en qué consistía su propuesta religiosa?

3-    Averigua que tienen en común las “Iglesias protestantes”.


4-    Analiza el siguiente texto:
Es cierto que los infieles se lamentaban de los numerosos impuestos pontificios (…) También es indudable que la cristiandad sufría de los males de la jerarquía: eclesiásticos que compraban cargos, alto clero que acumulaba beneficios, obispos de costumbres lujosas que gozaban de sus rentas como príncipes y descuidaban el cumplimiento de sus funciones, el bajo clero ignorante y, a veces, falto de vocación, (…) Papas de conducta equívoca. Pero, en mayor o menor intensidad, los abusos habían existido siempre y habían dado lugar a movimientos reformistas que no fueron precisamente la Reforma. No se referían a la verdad de la doctrina (…) Considerados en sí mismos, constituyen una explicación insuficiente.
        Indudablemente se experimentó la necesidad de una religión más sensible (…), los hombres del siglo XVI son tan religiosos como sus antepasados. Todos los actos de su jornada aparecen saturados de religión. (…) Nunca Dios ha estado tan cerca. Ello explica el éxito de las enseñanzas que ofrecían la Biblia y los Evangelios en lengua vulgar (antes en las misas se leía la Biblia en Latín) donde la gente encontraba lo que constituía su mayor deseo: un Dios viviente, humano e identificado con sus miserias.
Mousnier, R. Los siglos XVI y XVII. Destino libros. 1981

a-    Para este historiador los “abusos” no son suficiente para explicar las Reformas. ¿Por qué?
b-    Según el autor, en el siglo XVI “se experimentó la necesidad de una religión más sensible”. ¿Por qué? Explícalo con tus palabras.

5-    En el texto se habla de la creación de la orden religiosa “Compañía de Jesús”. Explica sus principales ideas.



miércoles, 11 de mayo de 2016

Tarea especial-portfolio

Estimad@s estudiantes, les dejo la tarea que formará parte del portfolio a fin de mes. La fecha de entrega de esta tarea será el jueves 19 de mayo.

La tarea puede ser realizada de manera individual o en parejas. Deberá ser entregada en formato papel (a mano o impresa) en hoja aparte, de forma prolija, con nombre de integrante/s.


Tarea:

A- Lee atentamente el texto.

B- Realiza un resumen del texto con tus palabras.

C. Realiza un esquema con las ideas más importantes.



Texto tomado y adaptado de Gombrich, E. Breve Historia del mundo.

Capítulo: UNA NUEVA ERA (Pág. 134-140):

¿Conservas cuadernos de  cursos  anteriores o algún  tipo  de  objetos  viejos? Al hojearlos, uno se sorprende — ¿verdad que sí?— de lo que ha cambiado en el  poco   tiempo  transcurrido  desde  entonces. Nos   extrañamos  de   cómo escribíamos. De las faltas  y de los aciertos.  Y, sin embargo, no nos dábamos cuenta de estar cambiando. Así ocurre  también con la historia del mundo.
Sería estupendo que,  de pronto, pasaran a caballo  unos  pregoneros por  las calles  y  nos  anunciaran: « ¡Atención!  ¡Comienza una  nueva era!».  Pero  las cosas  no  son  así:  las  personas  cambian sus  puntos de  vista  y  apenas  se percatan. Y, de  pronto, lo  advierten; como  tú  cuando examinas antiguos cuadernos de  clase.  Entonces   se  sienten ufanos   y  dicen: «Somos  la  nueva época». Y suelen  añadir: « ¡Antes, la gente era estúpida!».
Algo  parecido ocurrió en  las ciudades italianas en  los años posteriores al 1400. Principalmente en las ricas  y grandes ciudades de  Italia  central,  sobre todo  en Florencia.  Los burgueses de Florencia no consentían ya que los emperadores alemanes les  dictaran órdenes. Eran  tan  libres  e  independientes como  lo habían sido  en  otros  tiempos los ciudadanos de Atenas. Poco a poco,  estos burgueses —comerciantes y artesanos— fueron considerando importantes ciertas cosas que no lo habían sido para  los caballeros y artesanos de tiempos anteriores, en la auténtica Edad  Media.
No se tenía mucho en cuenta que  alguien fuera  un  guerrero o artesano de Dios que sólo actuaba en su honor y a su servicio.  Sobre todo  se quería  que la gente  fuese  capaz,  que  supiera e hiciera  cosas y tuviera juicios propios. Que no  preguntara a nadie  por  su  opinión y no  pidiera a nadie  su aprobación. Que no consultara libros  antiguos para  saber  cuáles  habían sido  los usos  y costumbres de antaño, sino que abriera los ojos y aferrara las cosas. Eso era lo que  les interesaba. Abrir  los ojos y echar  mano  de  las cosas.  Se consideraba más  o menos  secundario que  uno  fuera  noble  o pobre,  cristiano o hereje,  o  que  observara o no  todas  las reglas   del   gremio (agrupación medieval por oficios). Lo principal eran la autonomía, la eficiencia, la inteligencia, el conocimiento y la energía. Se preguntaba poco por el origen,  la profesión, la religión o la patria; la pregunta era, más bien: ¿qué clase de persona eres?
Y, de  pronto, hacia  1420,  los  florentinos se  dieron cuenta de  que  eran distintos de  cómo  se había  sido  en  la Edad  Media.  De que  valoraban otras cosas.  De que  les parecían bellos  objetos  que  no se lo habían parecido a sus antepasados. Las antiguas catedrales y cuadros les resultaban tenebrosos y rígidos;  las antiguas costumbres, aburridas. Buscaban algo  tan  libre, independiente y sin prejuicios como a ellos  les  gustara. Entonces descubrieron  la  Antigüedad.  La  descubrieron  correctamente.  Para  ellos no tenía importancia que  la  gente  de  entonces hubiera sido pagana. Lo único  que  les  sorprendía era  la  eficiencia  de  aquellas personas. Con  qué libertad habían debatido sobre  todas  las  cuestiones de  la  naturaleza y  el mundo, con razonamientos y contraargumentos; cómo  se habían interesado por todo.  Aquellas personas eran  ahora  los grandes modelos. Sobre todo,  por supuesto, en ciencia.
La gente  salió literalmente a la caza de libros latinos y se hicieron esfuerzos por  escribir  en un latín  tan bueno  y claro como el de los auténticos romanos. También se aprendió griego y se  disfrutó con  las  magníficas obras  de  los atenienses de la era de Pericles. Pronto comenzaron a interesarse mucho más por  Temístocles  y  Alejandro  Magno,    por  César  y  Augusto  que   por Carlomagno o Barbarroja. Era como si todo el tiempo intermedio hubiera sido sólo  un  sueño,  como  si la libre Florencia fuera  a convertirse en una  ciudad como  Atenas o Roma.  La gente  tuvo  de  pronto la sensación de que aquel tiempo antiguo y pasado de la cultura griega y romana había renacido. Ellos mismos se consideraban como  recién  nacidos por  medio  de  aquellas obras antiguas. Por eso se hablaba mucho de «Rinascimento», palabra italiana que significa  «renacimiento». La culpa  de lo que quedaba en medio  era, según se creía,   de   los   feroces   germanos,  que   habían  destruido  el  imperio.  Los florentinos querían hacer resurgir con sus propias fuerzas el espíritu antiguo.
Les  entusiasmaba  todo  lo  que  fuera  del  tiempo  de  los  romanos,  las magníficas  estatuas  y   los   suntuosos  y   grandes edificios cuyas ruinas aparecían por  toda  Italia.  Antes   las  llamaban «ruinas del  tiempo de los paganos», y eran más bien objeto de temor  que de observación atenta. Ahora, de pronto, se daban cuenta de su belleza.  Y así, los florentinos comenzaron a construir otra  vez  con  columnas. Pero  no  sólo  se buscaron cosas  antiguas, sino que se contempló, además, la propia naturaleza de una  forma  tan nueva y  sin  prejuicios como  lo  habían hecho  los  atenienses 2.000 años antes.  Se descubrió lo hermoso que era el mundo, el cielo y los árboles,  las personas, las flores y los animales. Se pintaron las cosas tal como  se veían.  Ya no  de manera solemne, grandiosa y sagrada, según se representaban en las historias santas de los libros de los monjes  y las vidrieras de  las catedrales, sino  con viveza  y gracia,  con desenvoltura y naturalidad, con claridad y exactitud, tal como  se quería  que  fuera  todo.  Abrir  los ojos y aferrar las cosas era también la mejor actitud en asuntos de arte. Esa era la razón  de que, en aquel  tiempo, vivieran en Florencia los más grandes pintores y escultores.
Estos  pintores no se sentaban ante  sus cuadros para  reproducir el mundo como unos  buenos  artesanos. Querían  comprender  además  todo lo que pintaban.  Hubo sobre  todo un pintor en Florencia  para   quien  no   fue suficiente pintar buenos cuadros, por bellos que  sean. Y eso que los  suyos eran,  incluso,  los más  hermosos. Quería saber  cómo  eran en realidad todas aquellas cosas que pintaba, y cuál la relación existente entre  ellas. Este pintor se llamaba Leonardo da Vinci. Era hijo de una  muchacha campesina y vivió de 1452 a 1519. Quería saber  cuál es el aspecto  de una  persona cuando llora y cuando ríe,  cómo  se ve  por  dentro un  cuerpo humano —los  músculos, los huesos y  los  tendones—. Para  ello  pidió  que le trajeran de  los  hospitales cadáveres  de  personas muertas  y  los  diseccionó  y  estudió.  Aquello era entonces algo totalmente insólito (…).  Cuando deseaba saber  algo, se dedicaba a hacer experimentos. No daba  mucho crédito  a la sabiduría libresca  de sus contemporáneos y fue el primer hombre que  se dispuso a conocer  de forma experimental todas  las cosas  de  la naturaleza. Dibujaba sus  observaciones y las apuntaba en notas  y cuadernos que guardaba y cuyo número era cada vez mayor. Al hojear actualmente sus apuntes, uno se sorprende a cada momento de  que  un  solo hombre pudiera estudiar y experimentar tantas cosas  de  las que entonces nadie  sabía, o no quería  saber, nada.
Pero  sólo una  mínima parte  de sus  contemporáneos llegó  a sospechar que aquel  pintor famoso  había  realizado tantos descubrimientos y tenía opiniones tan  insólitas. Era zurdo y escribía  con una  letra  diminuta y vuelta del  revés que resulta imposible de leer. Esto le vino muy  bien, probablemente, pues  en aquel  tiempo no dejaba  de ser peligroso tener opiniones independientes. Así, entre sus  anotaciones, leemos  la siguiente frase: «El Sol no  se mueve». No pone  nada más. Pero esas palabras nos permiten ver que Leonardo sabía que la Tierra  gira  en torno  al Sol, y que no es el Sol el que da la vuelta cada día alrededor de  la Tierra,  como  se había  creído  durante miles  de  años.  Quizá Leonardo se limitó  a esta única  frase porque sabía que en la Biblia no se decía nada de ello y que muchos creían  que, después de 2.000 años,  las cosas de la naturaleza se debían seguir  viendo como las habían visto los judíos  cuando se escribió  la Biblia. Pero lo que  llevó a Leonardo a guardarse para  sí todos  sus maravillosos descubrimientos  no  fue  sólo  el  miedo   a  ser  considerado un hereje.  Conocía  muy  bien  a los humanos y sabía  que  lo emplean todo  para matarse unos  a otros.  (…) No todos  los inventores fueron, por desgracia, tan buenas personas como Leonardo da Vinci, y así los seres  humanos han  llegado a saber  desde hace  tiempo lo  que  él no  quiso enseñarles. : En la época  de Leonardo da Vinci había  en Florencia una  familia especialmente rica  y poderosa. Eran  comerciantes de  lana  y banqueros. Se llamaban los Médicis  y, con su consejo e influencia, dirigieron la historia de la ciudad casi todo  el tiempo entre  los años  1400 y 1500, como  lo había  hecho antiguamente Pericles  en  Atenas. El  principal miembro de  la  familia   fue Lorenzo  de Médicis,  llamada «el Magnífico»  por el hermoso uso que dio a su gran riqueza.
Se  preocupaba  por   todos   los  artistas  y  eruditos.  Si  se  enteraba  de  la existencia de  algún  joven  dotado, lo  llevaba  a  su  casa  y  le proporcionaba instrucción. Por las costumbres de aquella casa puedes ver cómo  pensaba la gente  de entonces. No había  allí en la mesa  ningún orden de preferencia por el que  los más  ancianos y nobles  se hubieran de sentar en la cabecera,  sino que  el primero en aparecer ocupaba el lugar  preferente junto  a Lorenzo  de Médicis,  aunque fuera  un  muchacho aprendiz de  pintor; y quien  llegaba  el último, se sentaba al final, aunque se tratara de un embajador.
Todo  aquel  placer  nuevo por  el mundo, por  las  personas eficientes  y los objetos  hermosos, por  las  ruinas y los  libros  de  romanos y griegos  fueron imitados pronto en todas  partes, pues  una  vez que  se ha descubierto algo, el resto   de   la  gente   no  tarda  en  aprender.  En  la  corte   del   papa,   que   se encontraba de  nuevo en  Roma,  se  llamó  a  los  grandes artistas para   que construyeran palacios  e iglesias  según  el nuevo estilo  o los  decoraran con cuadros y  esculturas.  En  particular,  cuando  algunos  clérigos   ricos  de  la familia  de los Médicis  fueron elegidos papas, vivieron en Roma  los mayores artistas de toda  Italia, que crearon allí sus obras  más grandes. Es cierto que la nueva manera de  ver  las  cosas  no  estaba   siempre en  consonancia con  la antigua piedad y, por tanto,  los papas de entonces fueron menos  sacerdotes y curas   de  almas   de  la  cristiandad  que   príncipes magníficos deseosos de conquistar Italia y que gastaron de su capital  inmensas sumas de dinero para maravillosas obras de arte.
Esta actitud de  renacimiento de  la Antigüedad pagana se había  extendido igualmente  por   las   ciudades  de   Alemania  y   Francia.  Los   burgueses comenzaron también allí  a interesarse poco  a poco  por  las  nuevas ideas  y formas  y se dedicaron a leer nuevos libros en latín. Esto era más fácil y barato desde 1453, pues,  ese año, un alemán realizó  un gran  invento; un invento tan extraordinario como la invención de las letras  por  los fenicios.  Se trataba del arte  de  la imprenta. Hacía  tiempo que  se conocía  en China  —y desde hacía algunas décadas, también en Europa— la posibilidad de impregnar con tinta negra  planchas de madera talladas e imprimirlas después sobre papel.  Pero el descubrimiento del  alemán Gutenberg consistió   en  tallar   letra  a  letra  en taquitos de  madera, y no  placas  enteras. Esos  taquitos se podían colocar  a continuación en  una  especie  de  cajas  que  se  sujetaban en  un  marco  y  se imprimían cuantas veces se deseara. Una vez hecho  un número suficiente de copias  impresas de la página, se separaba el marco,  y las letras  podían volver a componerse. Era sencillo  y barato. Más sencillo  y barato, por supuesto, que cuando se copiaban los libros uno a uno en un trabajo  de años, como tuvieron que  hacer  los  esclavos   romanos y  griegos   y  los  monjes.   Pronto hubo   en Alemania e Italia un gran  número de imprentas y de libros  impresos, Biblias y otros  escritos,  y se comenzó a leer con pasión en las ciudades y hasta  en el campo.
Pero  por  aquel  entonces otro  descubrimiento transformó el  mundo más todavía. Fue  la  invención de  la  pólvora. Los  chinos  la  conocían   también, probablemente, desde  hacía   tiempo,  pero   la  emplearon  sobre   todo   para fuegos  artificiales y cohetes.  Fue en Europa donde, a partir del  año  1300, se comenzó a disparar cañonazos contra  castillos  y personas. Y no pasó  mucho tiempo hasta  que los soldados individuales tuvieron en sus manos enormes y toscas  armas de  cañón.  Es cierto  que  era  más  rápido disparar con  arcos  y flechas.  Un buen  arquero inglés  podía lanzar por  entonces 180 flechas  en un cuarto  de  hora,  que  es lo que  le costaba  a un  soldado cargar  el arcabuz y hacer fuego  con una  mecha  encendida. Sin embargo, en la Guerra de los Cien Años entre  Francia  e Inglaterra se utilizaron ya en varias  ocasiones cañones y armas individuales, que se difundieron cada vez más a partir de 1400.
Pero aquello no era digno  de  caballeros. No  se  consideraba  caballeresco meterle  a  alguien  una   bala   en  el  cuerpo desde  lejos.  Ya  sabes que los caballeros  estaban  acostumbrados   a   galopar  unos  contra    otros    para desmontar al adversario. Ahora,  para  defenderse de las balas  de los ejércitos de ciudadanos tenían  que llevar armaduras cada vez más pesadas y gruesas y pronto  dejaron de  montar a  caballo   con  cotas  de  malla;  y,  con  aquellas corazas,  comenzaron a parecer hombres de hierro.  Apenas podían moverse. Aquello era,  sin  duda, muy  imponente, pero  daba   un  calor  terrible y  no resultaba nada práctico.
Esa es la razón  de que se llame el último caballero al emperador alemán que gobernó en torno  al año  1500. Su nombre era  Maximiliano y pertenecía a la familia   de   los  Habsburgo,  cuyo   poder  y  riqueza  no  habían  dejado   de aumentar desde el rey  Rodolfo  de  Habsburgo. A partir de  1438 esta  familia no  fue  sólo  poderosa en  su  propia tierra  austríaca, sino  tan  influyente en general que únicamente se elegía emperadores alemanes a los Habsburgo. Sin embargo, la  mayoría de  ellos,  y también Maximiliano, el último caballero, lucharon  mucho  y  tuvieron  numerosas  preocupaciones con  los  nobles   y príncipes alemanes que  gobernaban casi  sin  cortapisas en  sus  feudos y  a menudo no  querían siquiera seguir  al emperador a la guerra cuando se lo ordenaba.
Desde  que había  dinero, ciudades y pólvora, la concesión de tierras  con sus campesinos como  recompensa por  servicios   de  guerra había  quedado tan anticuada como  la  propia caballería. Por  eso,  en  las  guerras que  mantuvo contra  el rey francés  por  las posesiones en Italia, Maximiliano no entró  ya en combate con sus caballeros sino que pagó  soldados que, a partir de entonces, fueron a la guerra para  ganar  dinero. Esos  soldados recibían  el nombre de lansquenetes. Eran  unos  tipos  feroces  y toscos,  vestidos con ropas increíblemente llamativas; personas cuyo mayor disfrute consistía en saquear. No luchaban por  su patria, sino  por  dinero, y marchaban con quien  más  les pagara. Por  eso el emperador necesitaba mucho dinero. Y como  no lo tenía, hubo  de  pedir prestado a comerciantes ricos  que  vivían  en  las ciudades. A cambio,  tuvo  que mostrarse amable con éstas, lo cual molestó a los caballeros que vieron  cómo eran cada vez más prescindibles.

A Maximiliano no le gustaba en absoluto tener  que atender a todas  aquellas preocupaciones  tan   complicadas. Habría  preferido  participar  en  torneos, como los caballeros de antes,  y describir sus aventuras en versos  hermosos a la dama de su corazón. Era una  extraña combinación de viejo y nuevo, pues le  gustaba mucho el  nuevo arte  y  no  cesaba  de  pedir al  máximo pintor alemán, Alberto Durero, que  había  aprendido mucho de  los italianos, pero aún  más de sí mismo,  que realizara cuadros y grabados para  darle  fama. Así, el  primer artista nuevo alemán nos  retrata en  sus  magníficos cuadros  el auténtico aspecto  del último caballero. Sus pinturas, al igual  que  los cuadros y  edificios   de   los  grandes  artistas  de   Italia,   son   los  «pregoneros» que anunciaron a  la  gente:  «¡Atención!  ¡Ha  comenzado una  nueva era!».  Y, si hemos  llamado noche  estrellada a la Edad  Media,  debemos considerar a esta nueva época  despierta que  se  inició  en  Florencia como  una  clara  y  lúcida mañana.


Link para descargar texto en PDF


https://drive.google.com/open?id=0BzsOtyihFeh2NWFONjhuSFVIUGM

sábado, 7 de mayo de 2016

Colonización de la región platense I

En clase comenzamos a hablar del Río de la Plata. No es la primera vez, ya que nos encontramos con esta región cuando hablamos de los primeros exploradores. Anduvieron en esta región Solís (1516) y Magallanes (1519) en tres otros. Vimos algunas características generales de su colonización en un texto que dictamos...


Carente de minerales preciosos, sin especies vegetales o animales de rendimiento apreciable y poblada por un corto número de indios salvajes, la Banda Oriental fue roturada como “tierra de ningún provecho” por los españoles. El indio cazador, pescador y recolector no proporcionaba la mano de obra necesaria. Por ello, la ocupación de la región paltense no fue realizada por el conquistador, sino el colono de forma tardía y paulatina.
R. Ares Pons.  “Vísperas de la primera Independencia


Además compartimos un mapa que seguiremos completando en las próximas clases.

Régimen Indiano

Inmediatamente después de la conquista, los españoles comenzaron a planear cómo administrar tanto política como económicamente sus nuevos territorios... Para ello necesitaron una serie de leyes y disposiciones que los autores denominaron "Régimen Indiano". A pesar que se lo define como un SISTEMA, en general se trató de respuestas a situaciones concretas que se fueron encontrando más que a un plan.

Dejo el texto que compartimos en clase...

Régimen Indiano

Se llamó "Régimen Indiano" o Régimen Colonial al sistema político y económico que creó España para gobernar y administrar las tierras americanas. Su organización fue el fruto de un largo proceso, en el que la Corona intentó superar algunas las dificultades, por ejemplo la distancia y los grandes privilegios dados a los descubridores y conquistadores.
Para esto, las Indias son consideradas como Reinos Singulares incorporados bajo la Dependencia de la Corona, organizadas separadamente de la administración de España con un régimen de gobierno distinto al de la península. La organización administrativa hace necesaria la creación de organismos especializados, algunos residirán en España y otros en América, algunos serán personales y otros colegiados. 
El Rey: es el monarca de España y también de las Indias. Todas las autoridades restantes dependen de él. Aunque su autoridad era absoluta, requería de ayuda para gobernar y administrar sus reinos; de ahí la necesidad de crear más organismos donde delegar funciones. Por ejemplo, sería necesario un organismo encargado de la elaboración de las leyes y la administración de todos los territorios americanos,  así como una institución que se encargara de controlar el comercio entre las colonias y la metrópoli.
La distancia entre España y América se convirtió en un problema, desde entonces fue necesaria la existencia en América de un representante del Rey, que se encargará de la fundación de ciudades, el reparto de tierras, el comando de las fuerzas militares y el cumplimiento de las leyes dictadas por el rey. Al mismo tiempo era necesaria la existencia de una institución que controlara a los funcionarios y se encargara de la justicia. Pero había otro problema, la dimensión de los territorios y la constante amenaza de europeos enemigos y pueblos indígenas fuera de control. Con este objetivo, se crearon bases militares que tenían por finalidad defender el territorio y se seleccionó a europeos para que gobernaran territorios más pequeños y así mantener el orden. Por último, cada ciudad necesitaba su propio control por lo que se levantó un gobierno en cada una de ellas, cuya función era su mantenimiento. 

Con este texto armamos un esquema en el pizarrón con las principales instituciones de gobierno político y económico... y le dimos números para ubicarlos en el texto.





Conquista de México (1519-1521)

En clase estuvimos trabajando con varios textos que hablan de diferentes aspectos de la conquista de México (1519-1521).

Texto 1: Los CONQUISTADORES...
Tenochtitlán, capital del Imperio Azteca.

En cuanto a los conquistadores, con el servicio al Rey y a Dios pretendían también conseguir prestigio, riquezas y ascender socialmente. Los conquistadores que llegaban a América provenían de todos los sectores sociales: segundones, nobles empobrecidos, gente de las ciudades, artesanos con oficio y campesinos. En algunos casos, sólo la mitad de la hueste eran soldados o marineros.
Para muchos de ellos, la conquista les permitiría el ascenso social e incluso un título de nobleza. Todos pensaban obtener riquezas, ya fuera porque habían salido pobres de la Península o porque se habían empobrecido empeñando todos sus ahorros en la empresa conquistadora.


VVAA. Pensar la Historia 2°. Contexto. 2016

Texto 2: Recibimiento de los españoles. ¿Que buscan los conquistadores?

Y Moctezuma luego envía a varios principales. Los encabeza Tzihuacpopocatzin, y otros muy numerosos representantes suyos. Fueron a encontrar (a los españoles), en la inmediación del Popocatépetl.
Les dieron a los españoles banderas de oro, banderas de plumas de quetzal, y collares de oro. Y cuando les hubieron dado esto, se les puso risueña la cara, se alegraron mucho, estaban deleitándose. Como si fueran monos levantaban el oro, como que se sentían en ademán de gusto, como que se les renovaba y se les iluminaba el corazón. Como que cierto es que eso anhelan con gran sed. Se les ensancha el cuerpo por eso, tienen hambre furiosa de eso. Como unos puercos hambrientos ansían el oro. Y las banderas de oro las arrebatan ansiosos, las agitan a un lado y a otro, las ven de una parte y la otra.
León Portilla, M. (Ed.). La visión de los vencidos. 1985

Texto 5: Divisiones internas y enfermedades...

La rendición de los últimos elementos  de resistencia en las ruinas de Tenochtitlan, el 13 de agosto de 1521 fue más un triunfo de las enfermedades llevadas por los españoles que de
us armas. La viruela transmitida por un esclavo africano causó estragos entre los defensores de la ciudad (…) La conquista de América fue una conquista realizada tanto por los microbios como por los hombres.
A pesar de esto, el derrumbamiento del Imperio mexica, de unos 25 millones de habitantes, por el asalto de unos cientos de españoles no puede explicarse solo por intervención de agentes externos. Se debió también a las fallas internas de la estructura del propio imperio, y en especial, de la naturaleza represiva  de la dominación mexica sobre los pueblos de México central. La conquista de Cortés fue tanto una revuelta interna de la población sometida contra sus señores supremos, como una solución impuesta desde el exterior.


Bethel, L. (Ed.) Historia de América Latina I. Crítica.1990

Mapa sobre la conquista de México